No hay muchas profesiones que incluyan el riesgo cierto de perder la vida en su desempeño cotidiano. Pero para quienes integran las fuerzas de seguridad, esta posibilidad sacraliza su trabajo y los distingue de otros oficios terrenales. Sin embargo, en vez de admiración social por esta entrega, muchas veces los uniformados perciben que la sociedad los estigmatiza como corruptos o responsables del “gatillo fácil”.
La “gramática” del sacrificio de las fuerzas de seguridad está ensamblada a los medios de comunicación, los discursos políticos y otras narrativas. En este libro compilado por el antropólogo José Garriga Zucal se analizan estas operaciones complementarias que vigorizan la producción y reproducción de imágenes de heroísmo y martirio. Imágenes que, encadenadas, pueden valorizar el trabajo policial al punto de llegar a legitimar prácticas violentas. Desde el campo de las ciencias sociales, los autores nos proponen reflexionar sobre cómo la falta de reconocimiento hiere la autoimagen policial y desnuda la intención de sobrestimar la entrega.