El desorden mundial
Cómo la vocación imperial de Estados Unidos lleva al mundo a una crisis permanente
Desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos se involucró en sucesivos conflictos bélicos en diferentes lugares del mundo. Medio Oriente, Centroamérica y el Caribe, Europa del Este, Asia… prácticamente ningún rincón del planeta quedó a salvo. Aunque el argumento siempre es ayudar a establecer la democracia o proteger los derechos humanos, lo cierto es que el complejo militar-industrial que conduce al país necesita de la guerra para poder subsistir. Rehenes de estos intereses, distintos gobiernos, tanto demócratas como republicanos, se niegan a enfrentar esta vocación imperial, que hunde al mundo en un estado de guerra perpetua. En El desorden mundial, Luiz Alberto Moniz Bandeira, el principal historiador brasilero y uno de los grandes internacionalistas de nuestra región, ofrece un análisis riguroso y accesible de las estructuras, tendencias y conflictos globales, y demuestra cómo Estados Unidos va desestabilizando al mundo.