En los últimos diez años la expansión de la cocina peruana por el mundo ha sobrepasado todas las expectativas que soñamos los cocineros de mi generación. Nuestra cocina es hoy una marca internacional, una tendencia de consumo global, una multinacional del siglo XXI de la cual son propietarios miles y miles de personas unidas por un sueño individual, el salir adelante con su producto made in Perú, y por un sueño colectivo, el que la cocina peruana continúe creciendo y creciendo.
Comprender en profundidad el proceso por el que la cocina peruana llegó a ser una de las más queridas en la Argentina es sin duda una herramienta esencial. En este mundo de la diversidad, cada ciudad es un mundo distinto, con sus amores y fobias, sus oportunidades y dificultades.
Es una bendición para nuestra cocina aprender del proceso argentino, algo que debemos agradecer sin límites a esta pareja maravillosa formada por Paloma y Gabriel. Sé, porque los conozco, que el título de este libro es en realidad un testimonio de amor. De amor de pareja que persigue un sueño, un ideal. De amor por una cocina por la que, en sus comienzos, apostaron animados por la nostalgia y que hoy, mirando hacia atrás y alrededor, los embarga de orgullo y esperanza.
Gastón Acurio
La colección Cocinas migrantes se propone recuperar las historias y los saberes culinarios de quienes vinieron a nuestro país, con sus experiencias, añoranzas, alegrías y pasiones. Para quienes dejan su tierra, la comida es una de las formas de relacionarse con el nuevo entorno, tanto para reafirmar sus orígenes como para dialogar con el mundo que los recibe. Recreaciones y adaptaciones guiadas por el paladar permiten que nos invadan nuevos sabores, modificando el mapa del gusto argentino. ¡Bienvenidas las Cocinas Migrantes a nuestra mesa!
